Algunas metas se cumplieron otras muchas no llegaron a nacer, pero lo que me da gusto de este año es que he aprendido muchas cosas algunas han costado sudor y decepciones, otras han sido tan gratas que no tengo las palabras precisas para agradecer.
Me doy cuenta que existe esa magia interna que no se puede apagar tan fácilmente y eso me da la pauta para seguir adelante con mis proyectos, este año algunos proyectos murieron y otros nacieron y me da tanto gusto de lo nuevo que nos espera.
En fin acaba el año y nace "Naga" con ese fuego interior que lo caracteriza.